Con la misma estampa física lucida en su época de esplendor como marcador central en Vélez -alcanzando su máximo logro en el campeón del Clausura 2005-, Maximiliano Pellegrino, a los 37 años, postergó su decisión de retirarse de las canchas y retornó a su viejo y primer amor futbolístico: Sarmiento, de Leones, su lugar en el mundo. O bien el Club Atlético Aeronáutico Biblioteca y Mutual Sarmiento, nombre completo de la entidad nacida en la ciudad cordobesa de Leones el 1° de octubre de 1906 y que participa del Torneo Federal B. El club donde Maximiliano, igual que su hermano mayor Mauricio (actual director técnico del sorprendente Alavés de España), desarrolló sus contactos iniciales con el balón de forma organizada.
"Al finalizar mi contrato con All Boys en diciembre de 2015, tuve algunas posibilidades de firmar en otros clubes de la B Nacional pero estaba un poco cansado por los problemas que repercuten en el fútbol y decidí dejar", le contó Pellegrino a Clarín. Sin embargo con el paso de los meses recibió una invitación capaz de modificarle los planes. "Volvimos con la familia a radicarnos a Leones. Y acá surgió la posibilidad de entrenarme en el club donde me crié y del que soy hincha. Era seguir haciendo lo que me gusta y ver como me sentía, si podía colaborar desde adentro de la cancha o si estaba para hacerlo desde afuera. Y la verdad que me sentí bastante bien", explicó.
Reconoció también: "Mi físico me ayuda, siempre fui flaco y no me encontré con la necesidad de tener que bajar de peso. Siempre me cuidé y gracias a Dios no tuve lesiones graves. La edad no es un factor determinante, pasa por las ganas. Esto pasa por una cuestión de querer colaborar y tratar de dar lo mejor que pueda. Veremos si estoy para la Liga y después ir viendo si puedo seguir en el Federal B".
En 2007 Vélez lo transfirió a Atalanta de Italia y luego pasó a Cesena; volvió al país en 2011 fichado por Colón. Dos años después se incorporó a All Boys, supuesto punto final de su carrera de futbolista. Hasta que Sarmiento volvió a atravesarse en su camino. "El club ha crecido mucho, está muy cambiado. Dio un vuelco muy importante desde que me fui de chico. Tiene una gran infraestructura y muy buenas instalaciones, además de haberse profesionalizado mucho más. Vienen jugadores de afuera, el año pasado trajeron a Claudio Morel Rodriguez, por ejemplo. Me atrevería a decir que no tiene nada que envidiarles a muchos clubes de la B Nacional", afirmó.
Pellegrino define a Leones: "Es una ciudad de 10.000 habitantes y, como la mayoría de los pueblos del interior, tiene en el centro su plaza principal con la iglesia enfrente. El campo es la actividad principal. La autopista que conduce a Rosario y Córdoba ayudó mucho al crecimiento del pueblo. Es un lugar muy tranquilo para vivir, acá bajás los decibles. Ofrece cosas que una gran ciudad no te da, y viceversa".
Con toda la ilusión a cuestas, Maxi Pellegrino intensifica su puesta a punto en un territorio conocido y querido. El Torneo Federal B, con fecha de inicio estipulada para fines de mayo, enmarcará el retorno a la actividad oficial de uno de los hijos pródigos de Leones. Y de Sarmiento.
INFO: CLARIN DEPORTES
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